Las artes marciales no sólo son una buena manera de mejorar tu condición física, aprender autodisciplina y mejorar tu calidad como persona. También es una buena manera de encontrar el amor y fortalecer tu relación.
Esto es lo que Pauline, de 26 años de edad, ha aprendido de su matrimonio con el practicante de Wushu Sun Renzhi, de 27 años de edad.
Paulina conoció a Sun cuando él estaba realizando una exhibición marcial en un centro cultural chino en París en 2012. Sun era, en ese momento, un estudiante en una escuela de negocios cercana. Después de su graduación, se volvió a su ciudad natal de Yangzhou, China, con Pauline.
Allí, Pauline se estableció y se apuntó a clases de mandarín para poder integrarse mejor en su nueva vida china. Después de descubrir que la madre de Sun, era también una experta instructora de Wushu, Pauline quiso aprender el arte marcial que le hizo enamorarse de Sun.
Pauline y Sun Renzhi se casaron en Nanjing en 2015. Tuvieron una segunda boda en un pequeño pueblo en Francia para los amigos y familia de Pauline. Finalmente se establecieron en París para comenzar su nueva vida juntos. Su historia de amor ganó la atención de los medios de comunicación después de que un bloguero chino, asentado en Francia, hablara de ella.
¿Crees que el entrenar con tu pareja puede beneficiar tu relación con ella?