Cualquier practicante de Wing Chun tarde o temprano practicará con un maniquí de madera o wooden dummy. Los originales dummies era más largos y estaban fijados en el suelo, pero la gran mayoría de los artistas marciales están más familiarizados con la variedad más pequeña. Esto hay que darle las gracias a Ip Man, quien quería seguir practicando, pero no disponía de la habitación adecuada. Por eso encargó a un amigo carpintero hacer un maniquí portátil para él.
El dummy es esencial para el Wing Chun, se suele usar para entrenar las formas y técnicas del estilo. Por supuesto, antes de usar el maniquí debes de configurarlo primero, es importante la manera en la que colocar los brazos.
Hay dos maneras de montar los brazos del dummy. Un brazo siempre tendrá un eje centrado; este es el brazo del medio. Los otros dos brazos tendrán ejes desplazados. La cuestión importante es cómo montar estos dos brazos. El montaje tradicional fija el brazo izquierdo una pulgada o dos más alto que el derecho, mientras que el montaje paralelo mantiene los dos brazos en el mismo nivel. ‘Paralelo’ aquí significa que, si dibujas una línea a través de las puntas de los brazos, la línea debe estar paralela al suelo.
Por supuesto, la principal pregunta es, ¿cuál es mejor? Hay varios argumentos que defienden cada una de las dos opciones. La tradicional es muy popular por una razón, pero esa razón ya se ha perdido. Los brazos paralelos, por otro lado, tienen un mayor equilibrio. Honestamente pensamos que no hay grandes diferencias entre ambos, lo que importa es cómo lo utilices. Un dummy es una herramienta para comprobar tu posición, que está determinada por tu juego de pies y el ángulo en relación con los brazos de tu oponente. Honestamente, si no puede decidir, cómprate un maniquí con los brazos intercambiables.
¿Tienes alguna preferencia entre los brazos tradicionales y los paralelos?