Los luchadores de MMA pueden provenir de diversas disciplinas como jiu jitsu, taekwondo, wrestling… Para prepararse contra tus oponentes, es importante que un artista marcial tenga diferentes técnicas de diversas disciplinas. Los puñetazos son una piedra angular de la lucha competitiva, y hay más de una manera de golpear eficazmente a tu oponente. El kárate y el boxeo tienen diversas maneras de golpear, entender lo que hace cada una (y por qué), hará que cualquier persona sea un mejor luchador.
Tanto el kárate como el boxeo utilizan puñetazos en línea recta. En boxeo se llama jabs, después de hacer contacto el puñetazo, se retrae inmediatamente para permitir poder dar más golpes sucesivamente. Esta es una técnica utilizada solamente en el boxeo y no en el kárate. En comparación con los jabs, los golpes de seguimiento no necesitan detenerse en un punto en particular. En su lugar, el boxeador acompañará el golpe con todo su peso generando una mayor trayectoria, haciendo un golpe más fuerte y potente.
Un golpe de seguimiento puede ser más eficaz en una pelea, pero en realidad se reduce a los objetivos de cada estilo de lucha. El boxeo consiste en hacer el mayor daño en un periodo de tiempo limitado. También llevan guantes, lo que hace extender la presión a una mayor área y difumina la fuerza del puñetazo. Necesitan golpear más fuerte para causarle mayor daño a su oponente. Por otro lado, el kárate es un arte marcial de defensa personal – esto hace que sus movimientos sean más conservadores, más enfocados y necesitan ser más fuertes para evadir o interceptar los golpes. No es necesaria una fuerza máxima para defenderte de una pelea.
Mucha gente considera que un golpe más fuerte es igual a tener una mejor técnica, pero en una pelea – competición o vida real – es más importante saber cómo golpeas para obtener ventaja, que lo fuerte que lo hagas.
¿Qué opinas de las diferencias entre el kárate y el boxeo?