Los samuráis de Japón han fascinado al mundo con sus cuentos de valor, honor y habilidades de combate. Muchos de los aspectos de la cultura moderna, desde el cine japonés hasta los medios occidentales, han recibido inspiración de estos guerreros de una manera u otra. Mientras que los samuráis han desaparecido hace mucho tiempo, su legado vive todavía y su legendaria moral de Bushido permanece, así como las disciplinas que han surgido inspiradas por sus enseñanzas.
El Bushido es un código ético conocido principalmente por ser el aplicado en la cultura samurái durante varios siglos. Desde el momento en que los samuráis nacieron, fueron entrenados según ese código y lo aplicaron a toda su vida. La muerte era lo más relevante de sus vidas. Si faltaban a su honor y lealtad debían ser ellos los que pusieran fin a sus días a través del seppuku con un corte en el vientre. Para ellos, morir de esta manera era hacerlo con honor y nobleza. Esta élite militar dominaba el arte de la espada, el arco, la lanza y armas de fuego, además de ser capaces de nadar, bucear y montar a caballo.
El propio Bushido fue difícilmente codificado de manera significativa durante su apogeo, el escritor Nitobe Inazo lo acercó al público con su libro de 1899 “Bushido: El alma de Japón”. En este libro se describía los principios de honor, un estilo de vida basado en la lealtad. También hablaba de las 8 virtudes que todo samurái debía de tener; rectitud, autocontrol, lealtad, honor, sinceridad, respeto, valor y benevolencia. El samurái que seguía los valores del Bushido valoraba también el estoicismo ante la muerte y la gran disciplina.
Debido a sus raíces en las artes marciales, el Bushido ha influenciado fuertemente algunas disciplinas que se practican hoy en día.
El Kárate es bien conocido por las conexiones que tiene con el Bushido. El karateka completo ha desarrollado su persona en distintos aspectos – cuerpo, mente y alma – de una manera armónica. El Maestro Gighin Funakoshi, quién trajo el kárate al continente japonés desde su hogar en Okinawa, creó veinte principios para el arte marcial, que fueron fuertemente inspirados por los ocho preceptos del Bushido.
Muchas de las influencias más fuertes del aikido provienen del Zen, que también había inspirado al propio Bushido. Kyudo, o tiro con arco, también tiene esta distinción, junto con el judo. Kendo, o la espada japonesa, estaba arraigada en el kenjutsu que los mismos samuráis practicaban, y otras tantas marcas de Bushido se pueden encontrar en diversas disciplinas de arte moderno.
El Bushido es una poderosa filosofía, un estilo de vida y una doctrina basada en el honor y el respeto, cuyos principios han penetrado en otras disciplinas modernas de artes marciales que hoy en día practican millones de personas. La edad de los guerreros y las espadas han desaparecido hace mucho tiempo, pero tales principios como la lealtad, la bondad, el respeto y el coraje tienen grandes aplicaciones en la automejora, la gestión empresarial y muchos más aspectos de la vida cotidiana. Incluso aquellas artes marciales que no están directamente asociadas al Bushido son compatibles con sus técnicas.
Sea cual sea la disciplina que practiques, considera tomar el camino del samurái, combinando lo que dice con su propia formación de artes marciales y su filosofía. Puedes encontrarte con un mayor grado de paz interior, adoptando los principios centrales caballero honorable cuyo legado vive todavía en nuestros días.